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Intendenta recibió a Concejales y Concejalas electos

La intendenta de Montevideo, Ana Olivera, recibió el 6 de diciembre en la sede comunal a los nuevos integrantes de los Concejos Vecinales.

La sala Ernesto de los Campos se vio colmada de representantes de los concejos vecinales. En un marco festivo, en el que tuvieron especial relevancia los alcaldes y alcaldesas quienes recibieron múltiples aplausos, los integrantes de los Concejos Vecinales recibieron un diploma y una carpeta con materiales relativos a el funcionamiento de los concejos.

La intendenta y el presidente de la Junta Departamental, Oscar Curutchet fueron quienes hicieron uso de la palabra en el evento. Ana felicitó a los presentes por la “valentía” de asumir un rol “que no tiene más recompensa que la alegría de servir al barrio, a su zona, a su Municipio y a Montevideo”.

Recordó que el proyecto de descentralización de Montevideo empezó hace 21 años “con la vocación de varios ciudadanos y ciudadanas de pensar juntos cómo construir ciudad”, se institucionalizó en 1993 (con los decretos que establecieron los limites definitivos de las 18 Zonas de Montevideo y crearon 11 Juntas Locales) y cobró un nuevo impulso con la sanción de la Ley de Descentralización Política y Participación Ciudadana. En referencia a esta última, dijo que si bien “lamentablemente no fue parte del debate de toda la sociedad, estuvo 3 años en la agenda política del país”.

Recordó también los miedos que había en torno a que el surgimiento de los Municipios iba a aplastar a los concejos vecinales, lo cual dijo se ha demostrado que no ha ocurrido sino que, por lo contrario, los han potenciado. “La existencia de los Municipios con recursos que han demostrado que pueden gestionar y que lo hacen muy bien, multiplica el proceso de participación”, expresó.

La jerarca destacó el rol de los Concejos Vecinales y recordó que es obligación de los Concejos Municipales presentarse ante éstos si así lo solicitan. Asimismo, dijo que a su criterio, es “una obligación moral” de los responsables del equipo departamental comparecer frente a los Concejos Vecinales cuando estos lo pidan, lo cual generó una ovación en la sala.

También expresó que cuando inicie las recorridas por los Municipios en 2013, el equipo de gobierno será el que escuche lo que tengan para decir los miembros del Concejo Vecinal.

Destacó la importancia de la capacitación de los concejales y concejalas para poder ejercer el derecho a la participación y dijo que los equipos técnicos de los Centros Comunales Zonales estarán disponibles para capacitarlos, como lo han hecho hasta el momento.

Por último, señaló que en 2013 se cumplirán 20 años de los decretos que institucionalizaron la descentralización y llamó a generar un debate con la ciudadanía sobre cómo avanzar en el proceso de descentralización, porque en este lapso “la ciudadanía cambió”.

Oscar Curutchet, presidente de la Junta Departamental, también destacó el rol de los concejales, que son quienes más conocen el barrio y pueden “sentir qué es lo que la gente quiere”. En este sentido, dijo que los Concejos Vecinales son una herramienta para “acercar el Estado a los problemas que tiene la gente”. Indicó que a nivel mundial los gobiernos locales están adquiriendo cada vez más relevancia y expresó el compromiso de la Junta Departamental para “profundizar la descentralización política real”.

Los Concejos Vecinales son órganos autónomos que facilitan la participación social en la gestión municipal, además de ser los portavoces de las necesidades, demandas y propuestas del barrio ante las autoridades nacionales y municipales.
Los concejales trabajan honorariamente y en muchos casos son representantes de organizaciones sociales, religiosas, culturales o deportivas. Entre sus funciones se encuentra la elaboración de proyectos y planes para mejorar los barrios y asesorar a las Juntas Locales. Participan en la elaboración del presupuesto municipal, proponiendo prioridades de gastos e inversiones que realiza la Intendencia y evaluando la gestión.

Cada Concejo establece su propio régimen de integración, con un máximo de 40 y un mínimo de 25 miembros. Esta integración debe tener en cuenta la representatividad de las distintas Subzonas (barrios o grupos de barrios), personas y organizaciones sociales y/o vecinales que contribuyan al fomento barrial.

 

Información extraída del portal de la I.M