La Quinta de Herrera, ubicada en el barrio Brazo Oriental, representa un invaluable testimonio del Uruguay de principios del siglo XX. Esta elegante residencia, que fue el hogar del destacado político Luis Alberto de Herrera.
Construida a fines del siglo XIX y acondicionada en 1911, la Quinta de Herrera es un ejemplo de la arquitectura ecléctica de la época, con influencias inglesas que se manifiestan en su diseño y distribución.
La casa fue concebida como un espacio de reunión y representación para uno de los líderes políticos más importantes del Uruguay. Sus amplios salones y jardines fueron escenario de numerosos eventos sociales y políticos, y recibieron a figuras destacadas de la vida nacional e internacional.
Muebles, objetos decorativos, obras de arte, documentos personales y una amplia biblioteca conforman las colecciones del museo, ofreciendo una visión detallada de la vida cotidiana y de los intereses culturales e intelectuales de la familia Herrera.
La Quinta de Herrera no solo es un museo, sino también un espacio vivo donde se organizan diversas actividades culturales, como exposiciones temporales, conferencias y talleres.
El 1961, los familiares de Herrera donaron la quinta al Estado. En 1966 pasó a formar parte del Museo Histórico Nacional.