HOMENAJE A LA MEMORIA ANCESTRAL AFRICANA
Comisión de Sitio de Memoria del Caserío de Filipinas
13 de mayo del 2023
La magnitud de la esclavitud para el Montevideo colonial es tal, que estudios recientes pueden afirmar que las primeras industrias de la economía naciente capitalista, fueron basadas principalmente en esta explotación y violación de derechos humanos. La construcción de obras públicas y privadas, la defensa en Batallones, la mano de obra de mataderos, saladeros, chacras, y todos los servicios domésticos y extra domésticos tuvieron el protagonismo africano. La abolición legal total de la esclavitud ocurre varios años después de la independencia de la República Oriental del Uruguay, pasada la segunda mitad del siglo XIX. Es en Brasil donde se extendió hasta 1888, siendo el último país en abolir legalmente esta violación humana, por ello departamentos como Artigas y Rivera es donde habitan la mayor cantidad de personas autoidentificadas como afrodescendientes.
El Caserío de Filipinas, también llamado Caserío de los Negros, se ubicó a pasos del Arroyo Miguelete, a las afueras de la ciudad colonial, actualmente en el barrio Capurro. Su construcción data del año 1787 a pedido del Cabildo de Montevideo en trato comercial con una de las Compañías españolas que se dedicaban al tráfico de personas africanas esclavizadas desde las costas de África hacia las Américas y Europa, la Real Compañía de Filipinas.
El Caserío es la construcción más grande que se puede hallar fuera de la muralla del Montevideo colonial y su función era de cuarentena, depósito, engorde y marcaje para su posterior venta, así como lugar de entierro. Más de 200.000 personas esclavizadas pasaron por este espacio.
San Felipe y Santiago de Montevideo, ciudad portuaria, se funda en un proceso que nace en el año 1724, no obstante, la presencia indígena en el territorio data de miles de años anteriores, mientras que la presencia africana forzosa en el Río de la Plata data del siglo XVI.
Año 2023, el proceso de resistencia de la ancestralidad africana, protagonizada por africanas, africanos, sus descendientes, y personas con ascendencias étnico-raciales indígenas y otras, permite reconocer el espacio del Caserío como una región que comprende: la bahía y sus alrededores, el arroyo Miguelete, las barrancas de la bahía Capurro, casas de vecinas y vecinos, una escuela y un jardín, y una plaza pública.
El sitio fue incluido en el programa La Ruta del Esclavo de Unesco en el año 2009, se declaró Monumento Histórico Nacional en el 2013 y Sitio de Memoria en el 2022.
13 de mayo 2023
Esta propuesta nace de la Comisión de Sitio de Memoria del Caserío de Filipinas, un espacio interinstitucional integrado por: vecinas de Capurro, la Comunidad Cultural Capurro, el Concejo Vecinal 16, el Concejo Municipal del Municipio C, la Mesa de Afrodescendencia del Municipio D, la Universidad de la República a través de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación y la Facultad de Artes, la Secretaría de Equidad Étnico Racial y Poblaciones Migrantes y el Museo de la Memoria.
Tiene como objetivos centrales:
- Visibilizar, difundir, y poner en valor el territorio del Sitio de Memoria Caserío de Filipinas con su historia y su presente.
- Homenajear la ancestralidad africana a través de expresiones culturales reminiscentes en el Río de la Plata.
Partiendo de nuestra ancestralidad africana, una de las expresiones del campo de las creencias con mayor presencia en nuestro país y región, es la religiosidad de matriz africana. En sus pilares encontramos: el culto a la naturaleza y a las fuerzas que allí se expresan, nominadas Orixás e Nkisis, y a la ancestralidad como fuerza vital promotora de un ciclo espiral que incluye el nacimiento, la vida y la muerte como parte de un todo necesario de interacción.
El 13 de mayo de 1888 fue la última fecha de abolición legal de la esclavitud en las Américas. Este día, se toma desde la espiritualidad de matriz afro, como el día de los Pretos Velhos. Ancestrales ilustres que representan el arquetipo de la sabiduría, la resiliencia, la humildad y la paciencia que necesitamos para continuar luchando más allá de las adversidades, recordando que la lucha es desde el interior de cada un y que la fuerza más poderosa, individual y colectiva, es el amor.
Elegimos este día para brindar homenaje a nuestra ancestralidad africana, a nuestros vivos y a nuestros muertos, tomando las artes de la palabra, el tambor y el movimiento, como claves de transformación individual y colectiva.
Palabras del alcalde
Discurso de Jorge Cabrera al público presente en la actividad:
Buenos días a todas y todos,
Antes de comenzar, me gustaría expresar mi más profundo agradecimiento a todos y todas las integrantes de la Comisión de Sitio de Memoria Caserío de Filipinas. La dedicación y compromiso en este importante proyecto merecen todo nuestro reconocimiento. También quiero agradecerles por la amabilidad de invitarme a compartir unas palabras.
En nombre del Gobierno del Municipio C, me complace enormemente formar parte de estas acciones conjuntas que buscan reivindicar la ancestralidad africana, rendir homenaje a ella y poner en valor este sitio histórico tan relevante.
Hoy, día de los Pretos Velhos, es un día para la reflexión, para la memoria tanto de vecinos y vecinas del Municipio, como de Montevideo y del mundo. Un día como hoy, pero de 1888, se declaró la última nulidad legal de la esclavitud en nuestras américas.
La humanidad entera tiene una gran deuda con el colectivo afro, colectivo con el cual aún no hemos hecho las justas reparaciones históricas, si bien desde nuestra fuerza política se han impulsado leyes y acciones en ese sentido, entendemos que aún no son suficientes.
La deuda histórica no deviene solamente por el trabajo gratuito en base a la explotación de los cuerpos que fueron la gran base de nuestros sistemas económicos coloniales y post coloniales, es también, una deuda por la construcción de una rica cultura mundial y local, donde la música, la danza, la espiritualidad, entre otros aspectos, se cuelan en los rincones más insospechados de nuestra vida cotidiana y de nuestra sensibilidad como individuos y como sociedad.
El 25 de julio del año pasado, en ocasión de conmemorarse el día de la mujer afrodescendiente y de la diáspora, se declaró de interés municipal este sitio de memoria y fue votado unánimemente en nuestro gobierno municipal. Claramente este no es un punto de partida, sino otro hito, en el esfuerzo conjunto de vecinos y vecinas para seguir reivindicando derechos y propender a sensibilizar a la comunidad sobre la lucha afro.
No quiero dejar de recordar, en esta ocasión, a la compañera Alma Shano, a quién le debemos la iniciativa de denominar como plaza Senzala, palabra de origen quimbundo, a la plaza de Pasaje Rossi y Sitio Grande, además de un ferviente activismo en varios frentes como el de los derechos de las personas afro, de las mujeres y de las infancias.
A todos y todas quienes han contribuido a cultivar la memoria, gracias.
Autor fotografías: Rafael Chagas