En el antiguo terreno baldío ubicado en Valle Inclán y Vilardebó se ejecutará la propuesta “Espacio Guaviyú” electa en el Presupuesto Participativo Ciclo 2016 por los vecinos del Municipio C. Se colocará nueva luminaria y pavimento de hormigón para que se pueda practicar patín y también mejorar la seguridad del lugar. Los proponentes Daisy Ross y Pablo Díaz contaron su experiencia y expectativas acerca del proyecto en donde la Intendencia de Montevideo invertirá $ 3.000.000.
¿Qué los llevó a presentar la obra?
Daisy Ross- Mejorar la zona y que los gurises pudieran aprovechar el espacio público. Antes de hacerse la obra la gente no pasaba por la plaza, no la pisaba porque tenía muy mala fama más que nada por ciertos delitos. Con el lugar en donde se va a hacer la obra -PP- tenemos el problema de que, aparte de tener un aspecto muy feo para lo que es la plaza, también invita a vivir gente y que vengan a parar personas que no son buena influencia para los gurises de la cuadra y el barrio. Por eso peleamos por mejorar el lugar.
¿Cómo se enteraron de la posibilidad de presentar un proyecto al Presupuesto Participativo?
Pablo Díaz- Primero porque uno de los vecinos de la comisión es Concejal Vecinal y está involucrado siempre en todo lo que es el trabajo en la zona. Ni bien se enteró que teníamos que presentar la propuesta nos pusimos en movimiento. Logramos la iniciativa siendo lo más plural posible, recogiendo las opiniones y después seguimos trabajando para que se votara. Cuando comenzamos a realizar la propuesta surgió de una lluvia de ideas. Empezamos con un salón, algo cerrado que se pudiera usar a pesar de las inclemencias del tiempo. Crear un lugar de encuentro, más amigable para los vecinos. Llamar a mejorar el espacio no sólo desde un punto de vista estético sino de contenido.
¿Recibieron ayuda en la elaboración de la propuesta?
DR- No recibimos ayuda, fue todo con los vecinos.
PD- No tuvo mucha complejidad la elaboración, sólo ver las ideas que teníamos y concretarlas. Sabíamos que después no todo lo que proponíamos podía salir pero por lo menos llegamos con esas ideas.
¿Qué expectativas tienen a partir de la ejecución de la obra?
DR- De que obviamente se realice y que podamos tener un local donde se puedan impartir cursos, eso es difícil pero más que nada seguir involucrando a la gente y que los gurises tengan otro espacio. A veces este sitio es chico, los fines de semana de verano puede llegar a tener 100 personas.
PD- Las expectativas son altas, está todo el mundo pendiente sobre qué se va a hacer y tiran ideas, eso está muy bueno. Si bien somos un grupo reducido todo el resto está ahí, en una órbita de ver qué pasa.
¿Recuerdan cómo se sintieron al enterarse que su propuesta había sido electa?
PD- Alegría porque hubo inspiración, hubo apoyo de la gente que no es fácil de recibirlo. Incluso después hicimos un análisis y te pones a ver que son sólo 400 votos, no es nada en un barrio que hay miles y miles de personas. No se aprovecha al PP de la manera que se podría aprovechar. De todas formas lo conseguimos. Costó porque estuvimos varios meses haciendo afiches, carteleras, hablando, hicimos distintas actividades, jornadas barriales puerta a puerta. Había mucha gente desinformada sobre qué era lo que se votaba.
¿Qué valoración personal le otorga a esta herramienta?
PD- Es muy buena porque es la oportunidad que tiene uno de incidir en cómo se utilizan los recursos económicos pero también los recursos humanos. Hoy en día estamos en contacto con el municipio y eso nos lleva a una mayor participación.
DR- Lo más positivo es que si la gente lo utiliza sirve para que se quejen menos. Tienen una herramienta para hacer más. La gente se va sumando de a poco.
Nota extraída del sitio web de Presupuesto Participativo.